Todo elemento en nuestro automóvil tiene una razón de ser, incluso siendo piezas pequeñas,
cumplen una función importante y por lo tanto, se deben de revisar y cuidar periódicamente. Unas
de esas piezas son las válvulas de aire en las llantas y los tapones que las protegen, que aunque
parezcan no tener importancia, tienen un propósito que explicaremos a continuación.


¿QUÉ FUNCIÓN TIENE Y CUÁL ES SU IMPORTANCIA?


En primer lugar, hay que mencionar que no son objetos decorativos para las llantas. Estos tapones
mantienen la válvula protegida de polvo y suciedades que podamos encontrar en la carretera,
garantizando que la válvula esté siempre limpia para realizar calibraciones o chequeos de aire y no
se le introduzca suciedad alguna al interior de la llanta que deteriore partes sensibles de la goma.
Además de mantener limpia la válvula, el tapón protege de posibles elementos externos que
puedan ejercer alguna presión que libere el aire. También, el tapón crea un vacío que permite
aislar la válvula en caso de una aceleración brusca o velocidades que puedan provocar pérdidas de
presión en las llantas, debido a las fuerzas centrífugas a las que se someten nuestras llantas.


¿CUÁLES SON LOS TAPONES RECOMENDADOS?


En la actualidad, los tapones de válvulas se pueden encontrar de varios tipos, colores, materiales y
tamaños, algunos incluso cuentan con llaves para evitar su robo. En algún tiempo se utilizaron los
tapones metálicos en llantas de vehículos Premium creyendo que eran mejores, sin embargo, esto
no es tan cierto y explicaremos el por qué.
Aunque los tapones hechos de metal sean más resistentes, con menor tendencia a deformarse y
se vean más estéticos, con el paso del tiempo se pueden quedar pegados debido a que se oxidarán
o se quedarán unidos con la válvula (que recordemos, es de metal también) provocando entonces
que fuerces el tapón para retirarlo y por consiguiente, rompiéndolo.
Por lo tanto, los típicos tapones de plástico seguirán siendo los recomendados, checando con
regularidad su estado y que no perdamos alguno de los cuatro. Recordemos que su única finalidad
es la de proteger la válvula de los agentes externos y nada más.


DATOS EXTRA Y CONSEJOS


Es buena idea revisar periódicamente los tapones y las válvulas. Tócalas para ver que se
encuentran en la posición correcta y que no estén barridas. Si observas daños, sin duda, están
perjudicadas. Cabe mencionar que es posible reemplazar tapones y válvula sin necesidad de
cambiar la llanta. De hecho, cambiar las válvulas en mal estado te va a ayudar a alargar su vida.

A veces, durante alguna reparación, mantenimiento o debido a factores externos, se pueden
perder o dañar los tapones. Un dato verdadero es que la llanta no perderá aire porque no tiene el
tapón, no afecta la circulación de aire de nuestra llanta. Reiteramos que la función principal es
proteger la válvula de la suciedad y la humedad.
Afortunadamente, las tapas de las válvulas de aire son fáciles de reemplazar y se pueden
encontrar en cualquier tienda de autopartes, te recomendamos mantener tus llantas en un estado
óptimo de funcionamiento y en condiciones de uso sugeridas para asegurar su vida útil.