Un buen conductor sabe que ser dueño de un coche conlleva una gran responsabilidad. Desde obtener el papeleo legal necesario para circular sin problema alguno hasta mantenerse siempre atento cuando se encuentre detrás del volante, los espejos bien colocados, el cinturón de seguridad puesto.

De esta misma forma, al tener un automóvil se acepta la responsabilidad de mantenerlo en buen estado, de modo que se pueda garantizar el bienestar de todos los pasajeros y de los otros carros alrededor. Esto significa revisar el aceite, verificar la suspensión, comprobar que los faros funcionen correctamente y cuidar las llantas del vehículo. Este último punto resulta particularmente importante al considerar que los neumáticos juegan un papel fundamental en la seguridad de todos, más que un diseño aerodinámico o acabados de lujo.

Y también debemos considerar en todo momento el impacto medioambiental que tenemos. Un neumático viejo o en malas condiciones no ofrece una buena eficiencia, lo que lleva a gastar más combustible. Es por eso que debemos, como consumidores responsables, estar siempre un paso adelante.

La palabra mágica: Reciclaje.

En sí mismo, reciclar significa volver a utilizar un objeto que ya ha sido desechado. Dependiendo del artículo del que se trata, se puede volver a emplear en la tarea para la que fue diseñada o se le puede dar un propósito nuevo. Lo importante es hacerlo.

¿Por qué reciclar? El mundo en el que vivimos hoy en día nos presenta retos que pueden parecer enormes, pero que con un poco de ayuda de parte de todos pueden llegar a resolverse, como la contaminación.

Y sí, como conductores, nos toca hacer nuestra parte. Es también por esto que tener un coche representa una gran responsabilidad. No podemos dejar que desechos, como llantas viejas, se queden a la mitad del camino cuando vamos por carretera, no podemos permitir que se vuelvan basura que se queda en las banquetas, no podemos permitir que se vuelvan un problema.

Ser un conductor en total control es aprender a ser mejor. Reciclar los neumáticos que ya no usemos es una oportunidad excelente para ponernos creativos y hacer un columpio para los hijos, una oportunidad para tener pesas nuevas en nuestra rutina de ejercicio, hasta una oportunidad para tener una maceta que no se podría encontrar ni en la tienda más exclusiva.

Es momento de que, como conductores, aprendamos a reciclar y ayudemos a mejorar el mundo en el que vivimos.

Y recuerda, cuando cambies llantas, pide JK Tyre o Tornel.